Sin conversación presencial.

  Esta historia es de ficción pero podría ser real.    

    

Puede que en alguna ocasión haya desaparecido de tu vida una persona con la que te habías sentido muy amiga. Muchos días junt@s, muchas ideas, muchos retos resueltos, esa sensación de que fluye la química sin que aparezca el sexo ni el amor. Ni falta que hace. Una relación auténtica, noble, cuidada, respetuosa, una compañía ideal con la que sabes que formas un gran equipo.

Todo funciona hasta que un día te explica una historia por mail y whats que viene a decir que ya no os veréis más, que no es tu culpa, que es algo complejo. A partir de aquí, intentas algo que parece más que razonable: una conversación presencial. Pero no lo consigues. Lo intentas una y otra vez, con las mejores palabras...

Y así pasa el tiempo, los días, los meses... y después de casi tres años tiras la toalla, sigues sin entenderlo, estás absolutamente segur@ de que no has hecho ni dicho nada que merezca esta situación. Sin conversación presencial.

L@s amig@s comunes coinciden en que su decisión no está basada en nada que tu hayas podido causar. Al contrario, consideran que le has dado a esa persona amistad, apoyo, motivación, contactos y consejos.

El mundo on line permite romper una relación sin dar la cara. Una buena idea en casos de machismo, violencia, enfados, prontos o impulsos, pero si has cuidado una amistad durante mucho tiempo no es justo que te paguen con esta moneda.

Al principio te duele porque te importa, pero cuando encuentras un muro delante y sabes que seguirá inmóvil, lo dejas estar.

Siempre he dicho que una hora de conversación presencial podría solucionar muchos problemas o malentendidos. 

Tenemos que darle valor a las relaciones.

Tengo que reconocer que hasta el día del whats se comportó como una personas genial, divertida, responsable, constante, positiva, alegre, creativa, capaz de lo mejor. Nada que decir sobre eso. 

Pero no puedes tirar por la borda años de amistad sin conversación presencial.

 Las conversaciones dan lugar a otras conversaciones, para emitir juicios, para reflexionar, para contrastar, para mostrar, para comentar, para opinar, para aclarar dudas, para divertirte, para trabajar en equipo, para hablar mirando a los ojos. 

Foto deferencia de Handyspanish.